Jardín al aire libre, acceso a actividades naturales, excelente limpieza

La señal de WiFi es horrenda!!! Solo funciona en el bar.

hotel muy chido, el personal es súper amable y atento. el desayuno es delicioso, con zumos naturales y pan riquísimo. las habitaciones son cómodas y limpias, me encantó el ambiente. la ubica es perfecta para explorar. tienen un jardín muy bonito para relajarte después de un día de aventuras.

pero el colchón era un poco blando y si había algo de ruido del pasillo.

Desayuno muy bien y limpio.

casi tuve que asistir al desayuno con un termo de leche y una magdalena, como si fuera un albergue. Además, que el agua de la ducha solo funcionara al azar es simplemente inaceptable. esperaba un trato de VIP, pero aquí hay que hacer cola para todo. sin duda, no voy a escribir una buena reseña, solo no puedo.

La ubicación es perfecta para explorar los impresionantes parajes de los Picos de Europa, a solo unos minutos en coche de Riaño. Las habitaciones eran amplias y estaban impecablemente limpias, lo que contribuyó a una estancia muy cómoda. Además, el restaurante ofreció una comida deliciosa, con platos generosos que realmente reflejan la comida local.

La señal de WiFi en las habitaciones era algo débil y solo funcionaba bien en el bar.

Momentos de comodidad y tranquilidad

El ambiente era muy acogedor, justo lo que necesitaba para relajarme tras un día de exploración. Además, disfruté de un desayuno delicioso, con opciones frescas y locales. El trato del personal fue excepcional.

Sin embargo, la calefacción no funcionaba como debería y hacía un poco de frío en la habitación, lo que me hizo un poco incómodo durante la noche. Aunque el ruido del pasillo se oía un poco.

Aprovecha el área de jardín al aire libre para relajarte después de tus aventuras diarias. es un buen lugar para disfrutar de la naturaleza.

experiencia agradable pero con detalles mejorables

La comida del restaurante realmente destaca por su variedad y calidad. los platos estaban bien presentados y llenos de sabor. Me encantó que se permitiera el acceso a mascotas sin costo adicional, un gran plus para los que viajamos con nuestras mascotas. La vista desde mi habitación era espectacular, disfruté cada mañana del hermoso paisaje montañoso desde la ventana.

Sin embargo, la presión del agua en la ducha fue deficiente en algunas ocasiones.

El ambiente del hotel era tan acogedor que me sentí como si estuviera en la cabaña de un viejo amigo. La comida, con su tradicional horno de leña, era más sabrosa que una cena en casa de la abuela, especialmente el cocido montañés que era puro amor en forma de comida. Además, la conexión WiFi era tan rápida que podría haber transmitido una serie de Netflix mientras admiraba las vistas de los Picos de Europa.

Ruido del pasillo

Hicimos una escapada para desconectar y la verdad es que fue un acierto. El desayuno era muy completo, con tostadas, fruta y zumo natural. Además, el personal fue muy amable. nos ayudaron a guardar las maletas para que pudiéramos disfrutar de la zona antes de marchar. La habitación era amplia y muy limpia, lo que realmente contribuyó a nuestra comodidad.

Habitaciones amplias y limpias, perfectas para descansar después de hacer senderismo por los Picos. La ducha tenía problemas de presión, lo que fue molesto. Se disfruta mucho el menú del restaurante, especialmente las tapas. Lugar tranquilo, ideal para desconectar y relajarse.

El desayuno cuenta con una tostada gigante de pan de pueblo, que fue un buen detalle, además de tener zumo de naranja fresco y frutas. La habitación es espaciosa y tranquila, lo que permitió un descanso reparador durante la noche.

Colchones demasiado blandos para mi gusto, lo que puede afectar la calidad del sueño. Durante nuestra estancia de tres noches, no repusieron el gel de ducha, algo que podría considerarse básico. El precio de 75€ por noche se siente elevado para un hotel con habitaciones tan básicas.

La ubicación es impresionante, ideal para explorar los alrededores. El restaurante ofrece tapas deliciosas y raciones generosas a precios asequibles. Sin embargo, la calidad de algunos colchones podría mejorar, ya que resultaron un poco blandos, y la limpieza del baño no fue la mejor ese día. Aunque el personal fue amable, experimentamos un tiempo de espera largo para ser atendidos en el comedor durante las horas pico.

volvería allí de nuevo

Las habitaciones son súper cómodas y están equipadas con todo lo que necesitas como TV de pantalla plana, calefacción y baño privado con artículos de aseo gratuitos. La comida en el restaurante es abundante y buena, especialmente el cocido montañés. Además, me encantó que se pueda llevar a tu mascota sin cargo extra.